martes, 31 de enero de 2012

Los Mashco-piro rompen su aislamiento voluntario, forzados a contactarse con madereros y empresas petroleras que invaden su bosque protegido

Estas son las imágenes más detalladas de indígenas no contactados recientemente obtenidas en la Amazonia peruana.
© Diego Cortijo|indigenasaislados.org

La tala ilegal dentro y alrededor de su territorio, y los vuelos a baja altura de los helicópteros de los cercanos proyectos petroleros y gasíferos, están forzando a estos indígenas a desplazarse de sus hogares en el bosque amazónico...
                                                                                                              
Survival International publica nuevas fotografías de indígenas aislados vistos de cerca, exactamente un año después de que las imágenes aéreas de un grupo no contactado de Brasil dieran la vuelta al mundo.
Las nuevas fotografías muestran a una familia de indígenas aislados del pueblo Mashco-piro en el sureste de Perú.
Protegidos en un Parque Nacional
Indígenas Mascho-piros vistos de cerca, Perú.
© Diego Cortijo/indigenasaislados.org
Se sabe que los Mashco-piros viven en el Parque Nacional del Manú, pero en los últimos meses se han recibido informaciones sobre un aumento en el número de avistamientos de sus familiares no contactados.
Muchos culpan a la tala ilegal dentro y alrededor del parque y a los vuelos a baja altura de los helicópteros de los cercanos proyectos petroleros y gasíferos de haber forzado a los indígenas a desplazarse de sus hogares.
Los mashco-piros son solo uno de los aproximadamente 100 pueblos indígenas aislados que habitan en el planeta.
Tal día como hoy, 31 de enero, hace exactamente un año, Survival publicó unas fotografías de una saludable comunidad de indígenas aislados en Brasil que copó los titulares de todo el mundo.
Las nuevas fotos son las imágenes más detalladas de indígenas no contactados que jamás se han obtenido.
Un peligro natural
Nicolás “Shaco” Flores fue asesinado por un grupo
de indígenas aislados en Perú después
de que intentara contactarlos.
© Survival
Sin embargo, el peligro de establecer contacto con pueblos indígenas que eligen mantenerse aislados se ha visto reafirmado con la reciente muerte de un indígena matsigenka.
Nicolás “Shaco” Flores murió después de que indígenas aislados le dispararan con una flecha cerca del Parque Nacional del Manú en Perú. Llevaba más de 20 años dejando comida y regalos para un pequeño grupo de indígenas mashco-piros.
Glenn Shepard, un antropólogo y amigo de la víctima, escribió en su blog y en Anthropology News: “La muerte de Shaco es una tragedia: era un hombre bueno, valiente y sabio. Creía que estaba ayudando a los mascho-piros. Y sin embargo, con este trágico incidente los mashco-piros han vuelto a expresar su firme deseo de que los dejen en paz”.
El aislamiento voluntario como defensa obligada
Atribuyen a la tala ilegal en el Parque Nacional
Manu la huida de su bosque ancestral.
© Survival

Beatriz Huertas, una experta peruana en indígenas aislados, ha explicado a Survival International que este caso “es raro, complejo y extremadamente delicado”.
“El contacto podría producirse en cualquier momento”, ha dicho Huertas. “Frente a la situación es necesario hacer un trabajo de información, sensibilización, prevención y elaboración de planes de contingencia con la población y autoridades de la zona, a la mayor brevedad posible, de tal manera que se eviten nuevas agresiones y sus consecuencias”.
El año pasado, Survival escribió a Sernanp, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado de Perú, para expresar su preocupación por un vídeo que mostraba a turistas que dejaban ropa para los indígenas en las orillas de los ríos.
A continuación se cerró esa zona a los turistas y se emitió una advertencia a los residentes locales.
El Departamento de Asuntos Indígenas, Indepa, tiene previsto instalar un puesto de guardia para proteger tanto a la población local como al grupo de no contactados.
Una advertencia de Survival
El director de Survival International, Stephen Corry, ha declarado: “Un año después, estas fotos ofrecen pruebas aún más irrefutables de la existencia de indígenas aislados. Ya no es aceptable que los gobiernos, empresas o antropólogos lo nieguen. Establecer un primer contacto con los pueblos indígenas aislados es siempre peligroso y, con frecuencia, letal. El deseo de los indígenas de que los dejen en paz debería ser respetado”.